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lunes, 24 de octubre de 2011

Uno, dos, tres...



"Nosotros recordamos, naturalmente,
lo que nos interesa y porque nos interesa".
John Dewey (Filósofo estadounidense)

Hacía diez años aproximadamente, que entraba por la puerta de aquella fábrica que cuando visitábamos veíamos las cosas de otra manera (dependiendo la situación) sobre todo cuando nos dejaban entrar, que no era siempre… Tenía dos plantas y cada una con su enigma a descubrir con el paso de la noche.


           En la planta baja siempre se encontraban gente más adulta reviviendo momentos de la amada juventud y en la primera gente más adolescente con la "tontosterona" al cien por cien. En esta última planta, tengo buenos recuerdo, ya que a parte de las personas que ponían música, estaba ella... a la que siempre veía bailando sujeta a esa  barandilla gris.

            El regreso se hacía esperar, tanto que cuando entré de nuevo por esa puerta volví a sentir que el gusanillo estaba presente en mi estómago por volver a ver cómo era aquello, los granos de la cara me volvían a salir de forma subrepticia y sobre todo mi cabeza volvía a revivir aquellos momentos del pasado.

            Pero un día regresé... Fue un retorno con mucha intriga al principio pero con mucha decepción al final. No había nada de lo que yo había conocido. La fábrica había perdido su encanto… mucha gente rara  habitaba sus rincones,  no había ningún enigma por descubrir y ella no bailaba apoyada en la barra de aquella barandilla gris…

Hoy todo ha cambiado… seguramente que tú también... ¿Dónde estás? 

sábado, 8 de octubre de 2011

Un certamen de relatos, muchas emociones...

Después de dos meses sin escribir un post, un verano de música y tranquilidad (a ratos) y un comienzo escolar demasiado estresante sobre todo por la cantidad de papeles que te obligan a hacer y las llamadas que tienes que realizar cuando eres coordinador de ciclo. Hoy vuelvo a sentir que estoy aquí de nuevo...

CERTAMEN LITERARIO DE LA FUNDACIÓN ABBOTT

“La vida es un síntoma tanto de los
 enfermos crónicos como de
los que no los son.”
Anabel Coco Martín (El Bicho)
(Ganadora del concurso
de relatos Fundación Abbott)

Con Anabel (Ganadora del Certamen)

El martes, tuve el placer de asistir al certamen de relatos que promueve la Fundación Abbott, sobre Enfermedades Crónicas en la Real casa de Correos de Madrid. Una fundación cuyo objetivo a parte de desarrollar acciones en el marco social, político y científico de la sanidad, es concienciar la repercusión que tienen las patologías crónicas, tanto a las personas que las padecen, como a su entorno social y familiar. 

Con l@s compañer@s y amig@s
          Un certamen de relatos lleno de emoción, con caras conocidas como la de la escritora Carmen Posadas y otras anónimas pero personalmente de mayor relevancia, caras conocidas de amigos y amigas que fuimos con un mismo fin, ver a nuestra amiga Anabel recoger un premio literato de gran importancia personal, por todo el esfuerzo que ha hecho (y sigue haciendo), con el fin de superar día a día los ataques de ese bicho (del que trata el relato) que no tiene cura y que la persigue constantemente.

Carmen Posadas

          Un certamen, dónde el bicho se manifestó de otra forma distinta a como suele hacerlo habitualmente, se reveló en forma de papel, de ilustración, de miradas, de palabras, de emoción...



           Hoy he recibido un correo muy gratificante, ya que Anabel se decide a abrir un blog para compartir con nosotros sus experiencias, y para empezar abrir boca nos deja su relato El Bicho. Aquí dejo el enlace y os ánimo que lo leáis, no tiene desperdicio.       

Hoy puede que esté aquí…, mañana puede también, que vuelva a desaparecer…